Cocina suculenta y exótica
Badajoz, 5
03015 Alicante
Teléfono 965 159 889
Abre todos los días
A la carta, 23/45 euros. Menú, 15 euros
Como dice el proverbio árabe, quien no sepa sonreír, que no abra tienda. Y que no se haga camarero. Las pamplinas con el vino nos interesan muchísimo menos que la reconfortante sonrisa de un profesional como Radouane, que nos sirve con eficaz cordialidad los platos suculentos y exóticos preparados por su patrón, Ibrahim Huetisaih: harira (4,59 euros), bastela (7,83), humus (5,94), tabulé (5,94), tajin de cordero (13,77), cuscús royal (17,01)… Son recetas en las que frecuentemente conviven lo dulce y lo salado, y en las que el sabor —su razón de ser— se potencia sin complejos con especias y condimentos: como las de nuestros ancestros, en una línea de la que Occidente se apartó hace décadas —o siglos— y que en el Magreb sigue absolutamente viva. Por eso nos resulta paradójicamente familiar, porque guardamos su memoria en lo más recóndito de nuestro disco duro, aunque en nuestro fínder gastronómico predominen las cosas crudas y de colores, en vajillas imposibles a la moda niponizante de los últimos lustros. Aladdin, baluarte de esa cocina en Alicante desde 1997, se trasladó hace 5 años de Canalejas a este chalet evocadoramente kitsch en la calle Badajoz: un lateral de la avenida de Dénia. Su carta incluye la golosísima repostería árabe y hasta algún curioso vinito marroquí.
FOTO: LRS