Bala Perdida, lo último del Grup Iglesias en Madrid

Foto: Paco Montanet

Tres meses después de la exitosa apertura de su primera propuesta madrileña, Las Chicas, Los Chicos y Los Maniquís, el Grup Iglesias arranca una segunda aventura en esta misma ubicación, con el espíritu heterodoxo que caracteriza a cada uno de sus proyectos pero con carácter propio.

Es así como nace Bala Perdida, en la planta -1 del Hotel Axel, en una cava subterránea que alojó en su tiempo un club clandestino enormemente popular entre el público gay del Madrid del franquismo. Se trata de un club que irá cambiando de ambiente con el paso de las horas y que combina los conceptos de snackería y de coctelería.

La vertiente basada en snacks se centra en la franja horaria del afterwork y propone bocados sencillos y atractivos marca de la casa como las aceitunas sferificadas, las cortezas de cerdo con maíz y cilantro o las minipizzas de tomate y parmesano. Por su parte, la coctelería presta especial atención a los ingredientes naturales y contará con especialidades como el Mari Carmen (ginebra, zumo de lima y toques de frutos rojos), el Tiro Loco (tequila, jengibre, limón y naranja) o el Miguel de Molina (vodka, champagne, cassis y maracuyá), este último en homenaje al artista que actuó en el local en su anterior etapa. Todo ello ofrecido en un espacio único y cargado de historia al que el estudio El Equipo Creativo ha dotado del inconfundible carácter de todos los proyectos de los hermanos Iglesias.