Si descartamos la gastronomía como uno de los atractivos de Benidorm, es quizá que el bosque no nos deja ver los árboles y la apabullante oferta de restaurantes y comederos nos impide reparar, por ejemplo, en las tabernas del Casco Antiguo. La gastromovida de la calle Santo Domingo es todo un fenómeno gastronómico y geopolítico, de ambiente bullicioso y cosmopolita, que por momentos resulta lo más parecido a la de cualquier zona de pintxos de cualquier ciudad del País Vasco con algún turista más.
PINTXOS, ASADOS Y GASTROTAPAS AURRERA
Entre incontables tabernas de pintxos, al menos seis locales de estilos diversos en la calle Santo Domingo son del Grupo Aurrera y todos ellos están entre los mejores. Forjado desde la nada por los hermanos García Bosque, el buque insignia es la Sidrería Aurrera, con autoservicio de sidra de tonel “al txotx” e impecables especialidades características de esa fórmula genuinamente vasca: tortilla de bacalao, besugo, chuleta de buey… No se quedan atrás el bacalao al pilpil, el cordero al horno o el cochinillo estilo Segovia. Junto a los chipirones en su tinta, hay entrantes más heterodoxos e igual de apetitosos: habitas con foie y almejas o alcachofas rellenas de brandada de gambas. A los postres, una buena manzana asada o una cuajada. En la carta de vinos predominan Rioja y Ribera del Duero, y el servicio, habituado al lleno diario, es de una incontestable eficacia.
El primer negocio del grupo fue Pintxos Aurrera, abierto en 1991 en el más puro estilo del Casco Viejo de San Sebastián: pintxos y raciones en un irresistible expositor que atrapa al transeúnte. El Bodegón incide en esa línea —bacalao al pilpil, oreja a la plancha, huevos estrellados con jamón, revueltos, tempuras, tablas, siempre muy bien presentados— con una acogedora ambientación neorrústica. La Brasería se caracteriza por su decoración de diseño y su parrilla de carbón —carnes, pescados, mariscos— y también ofrece menús con el arroz como protagonista, además de buenos vinos. De lo tradicional a lo contemporáneo, La Tapería es un gastrobar de lo más actual: cocina en miniatura con pintxos de cuidada estética y calculada creatividad en un local de ambiente mundano, con una buena carta de cervezas y vinos. El Bar Gorbea, en la plaza donde finaliza la calle de Santo Domingo, es una recoleta taberna vasca con pintxos y raciones.
LA DEHESA DE DON SATURNINO
El punto fuerte de este enclave bilbaíno en el casco antiguo de Benidorm son las tapas vascas: un repertorio de casi 200 pintxos, basados en la tradición o en la inspiración de su propietario, Eleazar Valcuende. Todos se elaboran íntegramente en su cocina y una de sus especialidades más celebradas son las croquetas de jamón, sabrosas, cremosas y crujientes como Dios manda. Entre bacalaos al pilpil, pimientos de Gernika, champiñones a la plancha con ibérico o tablas de quesos, el jamón de Guijuelo de su propia marca, que también se vende para llevar, es una de las señas de identidad de La Dehesa de don Saturnino, además de la carne de cerdo ibérico De Raza. Un buen repertorio de vinos de la Rioja Alavesa por copas acompaña a los pintxos en la barra o a una comida con más empaque en el comedor. Pero la parroquia suele decantarse por su concurrida terraza en plena calle de Santo Domingo, eje de una movida en torno al tapeo con un aire tan vasco como cosmopolita en la capital del turismo.
LA CAVA ARAGONESA
Abierto en 1980, en un local de apenas 30 metros cuadrados, ocupa ahora 450. Su oferta de entonces era así de escueta: copa de cava y canapé. Ahora, tiene una impresionante barra cuyas señas de identidad, entre decenas de tapas y pintxos, son las tablas —por ejemplo, de jamón, salmón, queso brie y paté a la pimienta— y las yescas: pan a la catalana con aceite de oliva virgen y más de cien variedades de embutidos, quesos, salazones y ahumados. Desde 1993 está al frente Francisco Javier del Castillo, hijo del fundador y reputado sumiller, que se ha clasificado para la final de La Nariz de Oro. Así, su carta de vinos, con 700 referencias, es otro de los atractivos de La Cava Aragonesa. Apartado de la bulliciosa barra, tiene un confortable comedor con carnes, pescados, cazuelas y arroces.
SANTO DOMINGO Y ALREDEDORES
Gaztelutxo es un pequeño bar especialista en bacalao —pincho, tortilla, a la bizkaina— y boquerones en vinagre. También vasco, pero del lado francés, es Bi-Arritz, que sirve caracoles a la bourguignone, ostras de Arcachon y otras exquisiteces en un diminuto local con terraza en la calle. En La Bohème, el belga Pascal Lafargue prepara unos excelentes mejillones y muchas otras tapas, en un local recién reformado a cuya oferta ha incorporado carnes de Galicia. En Taberna Tamboril, comida navarra en raciones generosas y a precios ajustados. Muy cerca de la calle Santo Domingo, Patrizzi (en Rosari, 9) tiene un estupendo repertorio de tapas y también de cafés, tes e infusiones.
Dónde están
GRUPO AURRERA
Pintxos Aurrera Bar Gorbea La Brasería La Tapería La Sidrería El Bodegón Calle Santo Domingo Tel.: 618 131 873 www.grupoaurrera.comLa Dehesa de don Saturnino Santo Domingo, 8 Tel.: 693 406 922
La Cava Aragonesa Plaza de la Constitución, s/n Tel.: 966 801 206 www.lacavaaragonesa.es