Algunos de los mejores bartenders españoles han participado en la World Class Competition, el certamen internacional de coctelería organizado desde 2007 por Diageo Reserve. Esta distribuidora internacional de espirituosos premium y algunos de los participantes en el concurso han preparado esta ruta del cóctel por Madrid y Barcelona.
Lo más dulce de Filipinas
Sergio Padilla, finalista nacional de Diageo Reserve World Class Competition desde la coctelería del restaurante Boca Grande, traslada a sus clientes hasta las famosas montañas de la Isla de Bohol con su cóctel Chocolate Hills. Lleva tequila Don Julio Reposado —de aroma suave, con notas de chocolate y frutas cítricas—, licor de jengibre y sirope de chocolate picante, además de menta y polvos de cacao y fresa.
Chocolate Hills: 40 ml de Don Julio Blanco, 20 ml de Domaine de Canton, 10 ml de sirope de chocolate picante, 6 hojas de menta y un toque de zumo de arándano.
Misticismo en Sri Lanka
En el club privado del restaurante Dime, al que se accede por una puerta secreta, Francesco Angotti ha creado Ceilán, que toma el antiguo nombre de Sri Lanka. Servido en vaso Old Fashion, combina el suave dulzor del ron guatemalteco Zapaca Centenario Nº 23 con una infusión de lima kafir, canela y té negro, aderezado con jengibre fresco.
Ceilán: 40 ml de Ron Zacapa 23, 80 ml de Sri Lanka Cordial, 5 ml de zumo de lima, 2 golpes de bitter de naranja y una rodaja de jengibre fresco
Londres cosmopolita
Giuseppe Santamaria, de la coctelería del hotel de lujo Ohla, crea Bloomsbury Fizz, con el que traslada a sus clientes hasta el distrito londinense en el que Charles Tanqueray fundó en 1830 una pequeña destilería, donde nació su gran ginebra. Esta moderna versión del Gin Fizz realza el sabor fresco y cítrico de Tanqueray Nº Ten, al combinarlo con notas de albahaca, y lo equilibra con el calor aterciopelado del oporto.
Bloomsbury Fizz: 40 ml de Tanqueray Nº Ten, 20 ml de oporto, 10 ml de zumo de limón, 10 ml de zumo de lima, 20 ml de jarabe de azúcar, 6 hojas de albahaca, un clara de huevo y un chorrito de soda.
Los mares del Sur
Diego Cabrera, artífice de una de las coctelerías más trendy de Madrid, crea Perla, un combinado a base de Tanqueray Nº Ten, considerada por el bartender como una perla dentro del mar de ginebras que hay en la actualidad. La perla se representa en el cóctel con una bola de hielo.
Perla: Tanqueray Nº Ten, Campari, azúcar, zumo de limón y bitter de ruibarbo.
El espíritu de Florida
Alberto Fernández, de la gastrococtelería de Pintor Rosales, ha ideado el Cîroc on the Beach, una versión del clásico Sex on the Beach, que tiene su origen en la década de los ochenta en Fort Lauderdale, Florida. Para la ocasión, ha reconducido sus aromas frutales hacia lo floral, sustituyendo el melocotón por el cherry brandy y la granadina por el sirope de flor de hibisco. Del vodka Cîroc se desprende una tenue fragancia a regaliz y flores.
Cîroc on the beach: 50 ml de Cîroc, 15 ml de Cherry Brandy, 40 ml de zumo de naranja, 40 ml de zumo de arándanos y 15 ml de sirope de flor de hibisco.
Amsterdam Bohemia
Amsterdam, la urbe boho por excelencia, sirve de inspiración a Carlos Moreno para la creación de Little Amsterdam. El protagonista de este cóctel es el vodka Ketel One, que recoge la tradición holandesa de la elaboración de destilados desde hace varios siglos y le incorpora un refrescante twist de sabores a naranja amarga con matices de mermelada y avellanas: Grand Marnier Cordon Rouge.
Little Amsterdam: Ketel One, Grand Marnier Cordon Rouge, zumo de lima, zumo de arándanos y frambuesas y absenta.