El invierno es dulce en Cividale

En el nordeste de Italia, la atmósfera navideña se vuelve dulce con varias propuestas en Cividale, declarada Patrimonio de la Humanidad

La Navidad comienza en Cividale del Friuli, declarada Patrimonio de la Humanidad, con el tradicional Mercadillo Navideño instalado en la céntrica plaza Paolo Diacono. Cada fin de semana, del 1 de diciembre al 6 de enero, los puestos de unos cien expositores despliegan los colores y sabores de la Navidad local: artesanía, regalos y, cada domingo, en la plaza, polenta, castañas, bizcochos, vino caliente, zumo de manzana y otras delicias ligadas a la tradición.

El 24 de diciembre, a las 4 y media de la tarde, llega Babbo Natale con su séquito de gnomos y elfos que reparten dulces entre los niños. Con este evento, el mercadillo de Cividale participa en un circuito navideño del que forman parte ciudades italianas y extranjeras, y que cada año atrae a curiosos y apasionados.

La Navidad de Cividale se enriquece con otra sabrosa experiencia: el Chocoamore. Del 7 al 9 de diciembre, un recinto abierto de 10 de la mañana a 10 de la noche acoge talleres del gusto presentados por maestros chocolateros y dirigidos preferentemente a los niños.

Abierto hasta el 6 de enero de 2013 —cuando se cerrará para dar paso a nuevas excavaciones—, el complejo de la Castaldaga —con el Templo Longobardo y el Monasterio de Santa María del Valle—, el Museo Cristiano y el Tesoro de la Catedral o el Museo Arqueológico Nacional son algunos de los atractivos turísticos de Cividale del Friuli, nombrada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco el 11 de junio de 2011.

Para más información www.cividale.net