Flanigan, pura magia en Mallorca

En el año de su XXV aniversario, Flanigan estrena una nueva zona de barra al aire libre para el gintónic de la sobremesa y las copas after dinner

Apenas 3 metros separan el mar, poblado por los barcos de recreo más imponentes de Europa, y la terraza fetiche para la jet set que amarra en Mallorca. Este escenario de sueños y caras conocidas nació de la mano de Miguel Arias, empresario pionero y exitoso que en verano cuelga la camisa para atender personalmente a su fiel clientela: auténticos fans de diversas culturas y procedencias, capaces de volar mil millas en una noche sólo para disfrutar de un vaso de su gazpacho helado.

DANDO BIEN DE COMER DESDE 1987

El restaurante tiene su origen en Cercedilla, cuando en 1967 Arias adecentó un modesto local de su pueblo natal bajo el nombre de Flanigan. Allí servía la música más puntera e inédita en España, traída en vinilos desde el otro lado del charco a golpe de teléfono y correo postal. En definitiva, lo que la gente quería y nadie más ofrecía. Así, a sus 18 años, Miguel Arias ya apuntaba maneras de emprendedor visionario y pronto expandió su magia y su swing a negocios turísticos y hosteleros de España y del mundo que hoy son referencia.

En 1987, un año después de la inauguración de Puerto Portals, su know how fue reclamado para convertir en un producto reconocible, singular y premium el Bar del Puerto, del que sólo conserva el cartel de bienvenida en un rincón y su esencia como alma del puerto, como meeting point creado a base de la difusión boca a boca de una idea: “ahí dan bien de comer”. El Flanigan mallorquín satisfacía la necesidad del que comanda un barco durante días (o no): ver y dejarse ver, sentirse mimado, atendido y libre, poder pedir hasta lo imposible y no tener que mirar nunca el reloj.

COCINA INITERRUMPIDA

Miguel Arias apostó por una cocina abierta ininterrumpidamente, desde las 13 hasta las 24 horas, tan mediterránea como internacional, que abarca desde unas singulares croquetas de chipirones, una tortilla española como Dios manda o un pan con tomate reglamentario hasta unas gambas blancas sabrosas y al dente, además de langostas, bogavantes o lubinas. De formato informal y pionero para un restaurante de lujo, la carta de Flanigan recoge todos esos platos que su parroquia no consiente que se supriman: calamares fritos, gambas al ajillo, rabas con mahonesa picante, arroces variados —paella, negro, con gambas, de verduras o fideuá—, unos macarrones de cine, la langosta frita con patatas y huevos, su inimitable gazpacho —servido en vasos de barro congelados— o su famosa tarta fina de manzana. La carta fija se complementa con nobles pescados y mariscos del día, además de otras sugerencias.

La variedad se extiende a la carta de vinos, presentada en un innovador formato tabloide que permite ver de un solo vistazo sus más de 300 referencias: desde vinos sencillos pero muy buscados hasta auténticas joyas de la enología. Efectivamente, en Flanigan se pueden acompañar unas croquetas con una botella de Petrus.

EL TEATRO DE LOS SUEÑOS

A excepción de las dos mesas corridas del interior, Flanigan es todo terraza, amplia, cubierta por nuevos y sofisticados toldos abatibles, encaramada al puerto deportivo, que de día es escenario del ir y venir de los yates de lujo y los paseantes del muelle, y de noche se transforma en un espacio mágico, casi teatral, bañado por los reflejos del mar, de lo más animado y concurrido. En verano, pasan por sus 100 mesas cerca de 500 comensales cada noche.

En definitiva, Flanigan es un espacio privilegiado que este año incorpora una nueva zona de barra con mobiliario lounge para tomar copas entre horas o después de cenar y en el que destaca su servicio de alta escuela. Cantera de algunos de los mejores chefs y maîtres del país, Flanigan cuenta con un equipo entregado, diligente pero invisible, que cuida al máximo hasta el más mínimo detalle. Como ejemplo, un sutil lazo blanco que rodea el cuelo de la botella en la mesa de aquellos clientes que prefieren servirse el vino ellos mismos.

FLANIGAN
Puerto Portals, local 16
Mallorca
Teléfono 971 679 191
www.flanigan.es
rest.flanigan@flanigansa.com
Desayunos, de 9:00 a 12:30
Cocina, de 13:00 a 23:00