
El cava más ambicioso de Codorníu reafirmó su vocación champañesa en cuanto la DO admitió la tinta pinot noir para la elaboración de blancos y les permite sacar pecho a los descendientes del fundador, en el siglo XVI, de la saga que traería este tipo de vino al Penedés. De paso, reivindican también su liderazgo —en cuanto a la superficie de su viñedo y a su veteranía como elaboradores— por lo que respecta a esa variedad y a la blanca chardonnay que le acompaña en los espumosos más ilustres. Como ellos, Jaume Codorníu es delicado y elegante desde su aspecto mismo: la burbuja, los reflejos rosáceos… Intenso, complejo y frutal en nariz, con notas de bollería. Cremoso, estructurado y fresco en la boca, con la amabilidad de sus 8 o 10 gramos de azúcar por litro: un brut, seco y suave (( http://www.gastronostrum.com/cava-brut-champagne-seco/ )) en su justa medida. Eminentemente gastronómico y apto para acompañar un gran menú de principio a fin, qué mejor para brindar por el Año Nuevo y mandar el 2012 a tomar fanta.