La cervecera Moritz fue creada en 1856 por un alsaciano que había llegado unos años antes a Barcelona. En su larga trayectoria, en 1927 introdujo la cerveza negra en Cataluña. Era entonces un trabajo artesano complejo, de prueba y error, con el que los antiguos cerveceros aprendían a mezclar las maltas torrefactas, que aportan color y aromas, con otras tostadas sin azucar, que le dan cuerpo y sabor. Pero aquella cerveza se perdió cuando Moritz cerró sus puertas en 1978. Tras su reapertura, en 2004, la cervecera ha ido recuperando sus antiguas creaciones, y ahora, con motivo del 160 aniversario ha vuelto a fabricar una de sus cervezas más emblemáticas. La Moritz negra destaca por su color negro intenso, que le proporcionan las maltas y la cebada torrefactas. La espuma es densa, fina y adherente y ayuda a retener los aromas tostados. En boca, sabores que nos remiten al café y el cacao, con matices de regaliz y ligeras notas ahumadas. Esta especialidad sólo se podrá degustar en la Fábrica Moritz de Barcelona o en la Moritz Store.
Cerveza tipo porter
Alcohol: 5%
Botella de medio litro
Se puede adquirir en Fábrica Moritz
Ronda de Sant Antoni, 39 – 41, Barcelona