Vino rosado con crianza Bodegas Martínez Alesanco DOC Rioja Garnacha Alcohol: 13,5% PVP: unos 6 €
Decididamente, Rioja no es sólo tempranillo y Martínez Alesanco lo ha puesto de manifiesto con su Nada que Ver, un singular varietal de la más que minoritaria maturana tinta. Pero tampoco rosado es sólo palote de fresa y esta bodega familiar con tanta inquietud emprendedora como arraigo —siete generaciones de viticultores— lo demuestra con este “clarete” de garnacha fermentado en barrica. Recién salido al mercado, tiene una jovialidad veraniega y una imagen desenfadada que no son incompatibles con la complejidad aromática y conceptual de un gran vino. De racimos seleccionados y maduros, fermentado y criado durante unos meses en barricas de roble, desarrolla los aromas de fruta silvestre que se esperan de un rosado, pero también notas florales y un toque de coco o de frutos secos: es la aportación de la madera, que le da estructura en boca sin desvirtuar su carácter fresco, alegre y frutal.