Tendencias: solidaridad, pequefoodies, cócteles…

Post-NadalPor Raquel Castillo y Lluís Ruiz Soler  

Los menús de gala y los informales, el champagne y la sidra, el whisky y la ginebra, el jamón ibérico y el de bodega… Todos se visten de fiesta para los días que se avecinan. Tres tendencias destacadas: las iniciativas solidarias, los cursos de cocina —con los dirigidos a los foodies más jóvenes en lugar destacado— y los cócteles navideños.

Según un estudio de Guiacatering.com, Barcelona es la ciudad de España donde más caros son los MENÚS NAVIDEÑOS, pero los más exclusivos los encontramos en Madrid. El hotel Palace tira la casa por la ventana en Nochevieja con la firma de Toño Pérez, del cacereño Atrio (dos estrellas Michelín): un menú con los colores como hilo conductor para el blanco tartar de zamburiñas con perla de cítricos, el negro foie con trufa negra y los otros cinco platos que se servirán con Laurent Perrier por 545 euros, cotillón incluido. La luz y el color son igualmente el leitmotiv en el Intercontinental, cuya cocina se inspira en Sorolla para estas fiestas: productos valencianos, guiños al mar, arroces o una decoración con los tonos habituales en la obra del artista protagonizarán las cenas de gala y los brunch navideños, entre 95 y 425 euros. En Nochevieja, el hotel Ritz servirá el menú del Festín de Babette, incluyendo las codornices en sarcófago y la Veuve Clicquot Ponsardin, a 720 euros el cubierto.

Entre otras propuestas, el Ritz monta además un árbol de Navidad a beneficio de la Fundación Amanecer: la SOLIDARIDAD se impone en estos días. En la Ribera del Duero, Emilio Moro propone apadrinar una cepa: por 45 euros solidarios, una botella de vino, un menú especial y una planta de su viñedo a nombre de uno. En cierto modo, de lo que se trata es de regalar EXPERIENCIAS y Viemocions ofrece varias relacionadas con el enoturismo, no sólo en las comarcas catalanas —Alella, L’Empordà, Terra Alta y El Penedés—, sino también en Barcelona o Champagne. De otro signo son las que ofrecen varias escuelas de cocinaA Punto, Le Cordon Bleu o Kitchen Community en Madrid y también Valencia Club Cocina—, incluyendo cursos para niños, adolescentes y foodies precoces.

Un brindis de BURBUJAS glamurosas. Moët & Chandon ofrece un jeroboam (3 litros) en una exclusiva champañera-bañera por mil euros y el Belle Époque Rosé de Perrier Jouët viene en una botella diseñada por Vik Muniz. Menos exclusiva y más barata es la cerveza, pero encaja perfectamente con las condimentaciones más trendy, y Damm ha sacado una nueva edición navideña, en botella de dos tercios de litro a 1,45 euros. También la sidra tiene burbujas y cada vez más clase. La Pomarina se apunta a una de las grandes tendencias: los CÓCTELES. A uno con 5 cl de whisky, 1,5 de zumo de limón y 1 de sirope en coctelera, acabado con sidra y una concha de almeja rellena de erizo desecado, le llama La Ría. El Doce Campanadas de StreetXo lleva 6 cl de vodka, 4 de zumo de lima, 4 de zumo de granada, dos cucharadas de azúcar de mazapán (se obtiene triturando un mazapán con 100 g de azúcar), 6 uvas machacadas y 6 enteras.

Los DESTILADOS se ponen de Navidad: Johnnie Walker Gold Label viene en una botella dorada, Chivas se presenta en un estuche reutilizable como joyero o corbatero para gentlemans, Martin Miller’s va con pajarita de El Ganso y Brockmans trae manual de perfect serve y un rizador como obsequio. El JAMÓN IBÉRICO asume igualmente su papel de regalo navideño, desde el Cinco Jotas con cuchillos, guante de malla, pinzas y manual por 970 euros, hasta el loncheado de Carrasco Guijuelo en un packaging como de panettone por 119. El Joselito Premium, que se apunta al Año Dual España-Japón, se presenta en un cofre artesano de madera lacada realizado con la técnica artesana del “urushi” y diseñado por Etsuro Sotoo. Pero lo cierto es que el 85% de los 100 millones de kilos de jamón que se comercializan anualmente en España son de cerdo blanco y casi el 40% se vende en estas fechas.