Tentenublo Wines
DOC Rioja
Para darle frescor a la tempranillo, los viticultores de la Rioja —y la familia de Roberto Oliván va por la cuarta generación en el oficio— le añadían frecuentemente a los tintos un pequeño porcentaje de uva blanca: la viura autóctona, conocida en otros lugares como macabeo. Siguiendo esa práctica, en desuso o inconfesada, Tentenublo Wines pone en valor una manera de hacer que —como en el caso de su txakolí Údico, del que hablábamos hace poco— hace de lo ancestral algo netamente vanguardista, aunque su artífice se refiera a todo eso como a lo aprendido “escuchando a los mayores en el bar del pueblo”. Además, la viura, junto a la crianza de 6 meses en barricas de roble francés, le da a la carnosa frutosidad del Xérico una elegante complejidad y un singular atractivo, que deben ser del siglo XIX, como dice Oliván, pero ahora se nos presentan como todo un rasgo de personalidad. LRS