Bodegas Numanthia lanza una edición limitada que reúne las añadas 2006 y 2007 del vino que da nombre a la firma. Sólo 25 lotes con dos botellas de Numanthia, una de cada cosecha, se venderán en tiendas especializadas. Se presentan en un estuche negro concebido como un objeto de regalo para la Navidad y representan para el aficionado una oportunidad de hacerse con el escaso Numanthia 2006. Aquel año, las condiciones climáticas propiciaron una de las mejores cosechas en Toro, cuya DO ampara al Numanthia. De características radicalmente opuestas, la vendimia de 2007 dio lugar a un vino muy distinto y este pack, que se vende por 70 euros, permite comparar las dos caras de Numanthia.
La bodega fue fundada en 1998 por la familia Eguren, que exportaba así a Toro la revolución del vino de Rioja de la que fue artífice con sus Sierra Cantabria o Señorío de San Vicente. El nombre aludía a la singularidad de un viñedo que había resistido de forma “numantina” diversos avatares, incluida la plaga de la filoxera. Diez años después, la adquirió el grupo Louis Vuiton Moët Henessy.